Víctor Sarabia es el responsable de La Mirada de los extremeños; un proyecto de la Filmoteca de Extremadura cuyo fin es la conservación del patrimonio audiovisual personal (cine familiar y amateur) de la región.

¿Cómo surgió este proyecto?
A finales de 2009 LACAJANEGRA Producciones presentó el proyecto La Mirada de los Extremeños a Filmoteca de Extremadura con la que empezó a colaborar en 2010 encargándose de la recuperación, catalogación y digitalización del Cine No Profesional extremeño.
La intención era ocuparse de aquellos materiales fílmicos a los que habitualmente no se les da demasiado valor, pese a que contienen una valiosísima información sobre las costumbres y los espacios de un tiempo y de un lugar.
En Extremadura el proyecto tiene especial importancia en la medida que recupera el pasado en movimiento de una región sin tradición en Cine Profesional y da sentido a la labor de Archivo de la Filmoteca que hasta entonces era muy limitada.
¿Cuánto tiempo lleváis y quienes formáis parte de él?
En 2013 Filmoteca de Extremadura se hizo suyo el proyecto y desde entonces trabajamos en él Juan Francisco Blanco, que se encarga de la parte técnica y de la digitalización de formatos 8mm y Super 8, y yo, que me encargo de localizar y recuperar las películas, catalogarlas y difundirlas mediante la ejecución de eventos específicos.

En estos 5 años el proyecto se ha consolidado, convirtiendo La Mirada de los Extremeños en un referente a nivel nacional en el campo de la recuperación de Cine No Profesional y a Filmoteca de Extremadura en una institución pionera en hacerlo.
¿Cómo ha respondido la gente?
Las familias Extremeñas son el principal motor del proyecto y están encantadas con él.
Para los propietarios de películas, La Mirada de los Extremeños sólo tiene ventajas ya que nos ocupamos de digitalizarlas gratuitamente y de guardarlas en las mejores condiciones de conservación para que no se estropeen.
Hasta la fecha hemos recuperado 127 colecciones de Cine No Profesional con un total de casi 2.000 rollos de película, mayoritariamente en los formatos 8mm y Super 8, pero también en 9,5mm Pathé-Baby, 16mm e incluso 35mm.
La Mirada de los Extremeños hace visible la labor de archivo de Filmoteca de Extremadura y esta visibilidad ha permitido encontrar verdaderas joyas.
Hace tres meses recuperé la película más antigua filmada en Extremadura por un extremeño. Se trata de una película en 35mm rodado en 1925 por el fotógrafo pacense Fernando Garrorena y titulada “Pintorescos rincones del Parque Ascensión”.
Es maravillosa.
Trabajáis con distintos formatos ¿Os supone algún problema o alguno es más complicado de tratar?
El principal problema (que tampoco lo es) es el de la digitalización ya que en Filmoteca de Extremadura sólo podemos digitalizar los materiales en formato 8mm y Super 8, el resto tenemos que mandarlos a laboratorios externos que se encargan de telecinarlos.
¿En qué estado suele estar el material?
Depende. Lo más habitual es encontrar películas con perforaciones dañadas, empalmes en mal estado y sin la cola blanca de inicio. En algunos casos las películas han perdido color, están ligeramente viradas o tienen hongos.
¿Habéis tenido que restaurar alguna cinta?
Nosotros hacemos una restauración básica de los materiales y en el caso de que la película lo necesite (como es el caso de la de 1925), se trabaja con un laboratorio externo.

¿Cuál es el procedimiento que seguís para digitalizarlo?
Siempre digo que nosotros no telecinamos sino que “hacemos una copia de visionado”.
Las películas las digitalizamos a tiempo real, mediante un proyector Bauer modificado que tiene una bombilla led en vez de una incandescente para evitar que la película se queme y una pequeña cámara de alta definición.
Al no hacerlo fotograma a fotograma ganamos en rapidez pero perdemos en calidad. Tampoco podríamos disponer de otro tipo de equipos de telecinado ya que tienen precios prohibitivos y externalizar el servicio también supondría un coste mucho mayor que hacerlo in situ.
Una vez digitalizado ¿Qué medidas hay de cara a su conservación?
Las películas originales se guardan en las cámaras de conservación y los archivos digitales en tres copias, una interna de trabajo en el PC y las otras dos externas, una en un servidor RAID y otra en discos duros que se guardan fuera de las instalaciones de Filmoteca de Extremadura para incrementar el grado de seguridad de las digitalizaciones.
¿Contáis con documentalistas en vuestro equipo?
Desgraciadamente no.
Lo que hemos establecido es un sistema de catalogación muy accesible, pensado para que cualquier persona pueda localizar un contenido, un material original o una digitalización fácilmente, con una mínima explicación de su funcionamiento y en menos de 5 minutos.
Para La Mirada de los Extremeños hemos creado una Base de Datos específica muy completa, con los campos formales y de contenido de las películas, que hemos ido mejorando con el tiempo, añadiendo algunos nuevos y que hemos validado con diversos expertos en catalogación cinematográfica.
¿Se devuelven los originales a las familias?
La condición sine qua non para que digitalicemos las películas y les facilitemos una copia es que los propietarios depositen sus materiales originales en Filmoteca de Extremadura.
Las películas se guardan en las mejores condiciones de temperatura y humedad dentro de las cámaras de conservación que tiene Filmoteca de Extremadura en Cáceres.
Al ser un depósito y no una donación, los propietarios pueden retirarlas cuando quieran, pero no es lo más aconsejable.
Muchas películas de Cine No Profesional han acabado en la basura después de que sus propietarios o herederos las pasaran en su día a VHS y tiraran los originales. Eso es lo que hay que evitar.
¿De qué manera compartís este tipo de filmaciones? ¿Se pueden visionar de forma libre?
El visionado del archivo La Mirada de los Extremeños se puede hacer en Filmoteca de Extremadura solicitando cita previa y, en cuanto a la difusión, hemos priorizado los eventos presenciales sobre la publicación online.
Regularmente proyectamos las películas recuperadas en los lugares en los donde fueron filmadas y lo hacemos, en muchos casos, proyectando el Super 8 original.
Son experiencias que acercan el proyecto a la ciudadanía, en las que el público asistente vive un momento mágico recordando cómo era su pueblo hace años, reconociéndose en las imágenes y con el sonido del proyector de fondo a sus comentarios.
También nos hemos sumado a la celebración anual del Cine Doméstico que se conoce internacionalmente como “Home Movie Day” y que organizamos a mediados de octubre en Cáceres desde hace tres años.
¿Qué derechos tenéis sobre esas imágenes?
Ninguno, los derechos de las imágenes son exclusivos de los propietarios y para su utilización tenemos que pedir un permiso específico.
Las películas que recuperamos contienen en su mayoría imágenes muy personales pero los propietarios permiten en un 80% su uso ya que saben que las tratamos con el mayor de los respetos.
El tema de los derechos es el más delicado en un proyecto como La Mirada de los Extremeños ya que si no se trata correctamente puede dañar al proyecto y eso es del todo inadmisible.
¿Os han solicitado imágenes para algún proyecto audiovisual?
Sí, para varios. Yo destacaría el videoclip “Remolino” del grupo de country-rock MILANA creado íntegramente con el cortometraje amateur extremeño más antiguo recuperado por La Mirada de los Extremeños, un falso documental titulado “Magos” y un documental sobre una expedición extremeña al ártico en 1980 titulado “Spitzberg”.
¿Habéis pensando en poner los vídeos a libre disposición de realizadores audiovisuales como ya han hecho otros proyectos similares?
Me encantaría. Personalmente abogo por el uso libre de las imágenes o bajo licencias como Creative Commons pero en un proyecto de titularidad institucional como es La Mirada de los Extremeños hacerlo resulta verdaderamente complicado.
No obstante, el proyecto forma parte de la recién creada RED DE CINE DOMÉSTICO en el que diversas iniciativas similares de toda España sumamos esfuerzos para crear un sistema de catalogación común a través de una plataforma web que permita compartir en un futuro las películas online.